La azucena
blanca, con forma de trompeta, simboliza la Pascua y la primavera para muchas
personas y es una decoración popular en los hogares en esta época del año.
Sin embargo, si tiene gatos, la
Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA, por sus siglas en inglés)
quiere recordarle que estas flores en particular, así como los lirios
atigrados, asiáticos, amarillos, de la mañana y de San Juan, presentan una
amenaza para la seguridad de sus amigos felinos.
Ingerir pequeñas cantidades de
plantas o hierbas puede ser normal en los gatos, pero la planta de lirio o
azucena en su totalidad (las hojas, el polen y las flores) es venenosa para
ellos, según Melanie McLean, una veterinaria de la FDA. Incluso si sólo comen
un par de hojas o lamen unos pocos granos de polen de su pelaje, los gatos
pueden sufrir una insuficiencia renal aguda en muy poco tiempo.
McLean explica que, si su gato ha
comido parte de un lirio o azucena, lo primero que advertirá es que le sigue el
vómito poco después. Esto puede atenuarse gradualmente en dos a cuatro horas.
En 12 a 24 horas, pueda que su gato empiece a tener una micción frecuente.
Entonces, si se presenta una insuficiencia renal, el gato dejará de orinar
porque sus riñones ya no pueden producir orina. De no atendérsele, advierte, el
gato morirá en cuatro a siete días después de comer un lirio o azucena.
Los gatos jóvenes por lo general
tienen riñones sanos, así que cuando muestran indicios de sufrir un daño renal
grave, el consumo de alguna sustancia tóxica es una de las primeras cosas que
los veterinarios investigan, explica McLean.
El tratamiento veterinario
oportuno es decisivo. McLean dice que aun si sólo sospecha que su gato ha
consumido un lirio o azucena, debe llamar de inmediato a su veterinario o, si
el consultorio está cerrado, llevar a su gato a una clínica veterinaria de
emergencia. El veterinario puede inducir el vómito si su gato acaba de ingerir
el lirio, y le administrará líquidos por vía intravenosa para prevenir la
deshidratación y mantener funcionando los riñones.
Otros lirios, como el alcatraz y
la cuna de Moisés, no ocasionan una insuficiencia renal mortal, pero pueden
irritar la boca y el esófago de su gato. El lirio de los valles o lágrimas de
Salomón es tóxico para el corazón, pues ocasiona un ritmo cardiaco anormal. Si
cree que su gato ha ingerido algún tipo de lirio o azucena, llame a su
veterinario.
Los lirios
o azucenas no representan mayor peligro para los perros, afirma McLean. Los
perros pueden tener algunos problemas gastrointestinales si comen uno, pero
nada que pueda considerarse de vida o muerte.
¿Significa esto que no puede
tener lirios en su hogar si tiene un gato? Aunque lo mejor es no tenerlos en su
casa, si quiere disfrutar de estas bellas flores primaverales, McLean
recomienda asegurarse de poner la planta en un lugar que su mascota no pueda
alcanzar, por más alto que salte.
U.S. FDA & DRUG
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