“Silla Sutra” sexualidad para personas con discapacidad

El Silla Sutra es una forma de ver prácticamente la sexualidad y sensualidad, no sólo de las personas con discapacidad motora, también de todos los que en algún momento han tenido limitaciones físicas, mentales y emocionales. Por medio del especialista que sin llegar a tener soluciones teóricas o científicas recomienda el mejor principio de realidad hacia lo práctico y funcional desde su experiencia personal y punto de vista como persona que ama, siente, se mueve, disfruta y vive a través de lo que tiene y no de lo que dejó de tener o hacer.

Comparte el poder disfrutar la sexualidad y sensualidad sin condicionamientos, juicios o pensamientos erróneos por falta de información y orientación, pero con responsabilidad y beneficio para uno mismo y los demás.

Hoy en día todavía encontramos pocas fuentes de información y orientación en cuanto a la sexualidad práctica en la discapacidad, así como la gran limitación de una sexualidad con etiquetas que verdaderamente son las que nos limitan más que nuestra realidad o circunstancia. Aún con los especialistas nos enfrentamos a no preguntar, inclusive creer lo que algunos que viven en una teoría antigua, nos dicen, como él ni pensar en una vida sexual activa, o no mejorar nuestras circunstancias físicas, mentales y emocionales, con nosotros mismos y con nuestra pareja, independientemente de la discapacidad.

Debemos de buscar más fuentes y especialistas realmente comprometidos y preparados con el tema, por eso en este espacio y este libro comparten opciones y circunstancias de actitud el que cada uno debe hacer su Silla Sutra, buscar sus posiciones y no solo físicas, si no las mentales, emocionales, de creatividad y sobre todo de comunicación y decisión para que con lo que uno tiene pueda disfrutar y encontrar total placer en una mirada, un beso, un olor y hasta poder disfrutar el ver disfrutando.

La imagen principal del libro demuestra la diferencia y la igualdad, lo diferente es que es una silla de ruedas. La igualdad, es una pareja dando y recibiendo amor, que puede ser él o ella la persona con discapacidad, simplemente una variante como puede ser en un sillón, en una silla cualquiera, en la cama, en la cocina, donde puedas y lo decidas.

Claro que hay que orientarse con el especialista sobre todo cuando entramos con medios farmacéuticos para algún tipo de disfunción Se comparte que los orgasmos cambian no solo físicamente, también emocionalmente porque aprendemos a crear nuestra sexualidad no solo con el pene y la vagina, sino que además incluimos, tiempo, calidad y cantidad, emociones, miradas, diversión creatividad porque tenemos que ingeniarlas para ver cómo será nuestra intimidad y complementar las variantes en el momento, con nuestras posibilidades y circunstancias.

El Silla Sutra nos enfrenta al compromiso de crear nuestras propias posiciones con nuestra pareja, romper los mitos de pene-vagina y tigres en la cama, brincando y gritando. Siendo que una sexualidad plena puede ser solo tocar, ver o disfrutar un buen momento sin llegar al coito. Cuando está presente una limitación física o alguna disfunción genital hay muchos medios y herramientas en las cuales nos podemos apoyar, y siendo insistente utilizar nuestra creatividad, penetrar también con palabras, con juegos eróticos, piropos y todo lo que nuestra circunstancia nos permita.

Una parte muy importante del libro es que se preguntan las cosas tal cual, y la mayoría de las cuales no sólo las personas con discapacidad lo cuestionan, sino también para nuestra pareja, la familia y aun los mismos especialistas, que son el inicio de una plática dirigida a resultados y acciones, el no quedarse con la duda, el ¿qué puedo?, ¿qué tengo que hacer?, ¿qué medios y recursos existen hoy en día?, etc.

También conocer uno de los tantos miedos que son las cuestiones fisiológicas, que debemos hacer con nuestra higiene para una relación íntima, rutinas urinarias, utilizar fármacos, etc. Así como diversas posiciones recomendadas para él y para ella.

La referencia del libro es a la iniciativa de encontrar opciones y soluciones a cualquier tipo de limitación ya sea física o emocional. Quitar etiquetas antiguas y erróneas en cuanto a las personas con discapacidad. Nuestros miedos a enfrentarnos con algo nuevo, a un tipo de relación física y sexual diferente a los demás o a lo que nos han transmitido por años. Encontremos nuestro placer en nuestras miradas, nuestras palabras, en un beso, provoquemos tener unos orgasmos en la oreja.

A groso modo el libro es una plática práctica de una persona con lesión medular con un especialista que muchos deseamos tener, en la cual hacer preguntas y las cuales la mayoría desconocemos las opciones y soluciones tanto hombres como mujeres. Tratar temas tan importantes que debemos tomar en cuenta y aplicarlos a nuestra vida como higiene, cuidados de la piel, rutinas y opciones urinarias y de evacuación. Conocer métodos como el cateterismo intermitente, y que la mayoría de los casos lo óptimo es dejar los pañales y sondas fijas que más que un bien, nos crean secuelas físicas y emocionales.

Para terminar mi punto de vista es que El Silla Sutra nos da la visión de que toda persona puede tener y debe crear su propio placer y su propia sexualidad activa. Siempre con una comunicación será el mejor aliado y el mejor medicamento y lo más importante a cualquier pregunta en cuanto a la sexualidad es: ¡INTÉNTALO!

 Fuente: Hablemos de sexualidad en familia.