¿De
adentro hacia fuera? ¿O de afuera hacia adentro? Comienza el año y, con
él, todo tipo de resoluciones. Para nadie es un secreto que bajar de peso es
uno de los más comunes, pero a veces también se trata de un cambio exterior más
allá de las medidas, como un nuevo color de cabello, atreverse a usar otro tipo
de ropa, etc.
Como
todo cambio, puede haber resistencia (¿por qué inventé cortarme el cabello?) o
incluso un miedo que ni siquiera te permita intentarlo, así que me pareció
oportuno darles algunas de mis sugerencias, porque he visto muchas veces
que estos cambios de imagen de comienzos de año esconden algo más bajo
la superficie, así que, si son para ayudarte a lograr algo más, ¡es
hora de atreverse!
Preguntarte
por qué lo haces
No
es que detrás de todo corte de cabello haya una reflexión filosófica sobre el
ser, a veces es simplemente porque se te enreda mucho y ya, pero esta vez ten
un momento de sinceridad contigo misma y pregúntate por qué estás haciendo este
cambio de imagen en este preciso momento.
¿Es
por agradar a alguien más? ¿Es porque vas a empezar un nuevo trabajo y
quieres que todo sea nuevo? ¿Una mala separación con tu pareja? ¿Una manera de
ayudarte a “comenzar desde cero”?
Descubre
qué es lo que te motiva y si realmente vale la pena. Muchas de ustedes
seguramente descubrirán que este cambio, aunque parezca sólo exterior, va más
relacionado con algo interior, como, por ejemplo, lograr más confianza
en ti misma para alcanzar otro tipo de metas.
En
este caso, el cambio de imagen no lo es todo y vas a tener que trabajar
en otros aspectos de tu vida también, pero puede ser ese empujón
que necesitas para dar el primer paso.
Buscar
referencias
Utiliza
Pinterest, Google o revistas de moda para ver qué
opciones hay en cuanto a cortes, tintes, tipos de ropa, maquillaje, etc. Te
sorprenderás de la gran variedad de estilos que hay y te podrás dar una buena
idea de cómo se ve antes de convertirte en un conejillo de indias.
En
cuanto a ropa, sí te aconsejo que te pruebes todo (incluso lo que
te parece que jamás te quedaría bien), ya que es algo tan sencillo como volver
al vestidor y quitártelo (no así con un corte que puede tardar meses en volver
a crecer).
Este
momento también es importante porque sirve para calmarte y analizar.
Muchas
llegan a la primera semana de enero con el famoso “año nuevo, vida nueva”, van
a la peluquería y le dicen a su estilista que les haga un look radical… y puede salir bien, pero
también puede salir muy mal y empezar el 2018 con el pie izquierdo.
Sé que en
este momento de “calma” es cuando muchas se arrepienten y no hacen ningún
cambio de imagen, pero es entonces cuando debes recordarte esa primera pregunta
de ¿por qué lo estás haciendo?
Además, no tienes que hacerte un cambio extremo de una
vez, puedes empezar con unos rabitos en lugar de teñirte todo el
cabello, por ejemplo; a veces sólo se trata de cambiar tu tipo de peinado o
maquillarte distinto; o en vez de cambiar todo tu guardarropa, puedes comprar
un par de piezas y accesorios e ir jugando y combinándolas con las que ya
tienes para ir poco a poco descubriendo este nuevo estilo.
A
veces es mejor empezar con pequeños cambios o ajustes y, a medida que vas
trabajando en tu confianza y fuerza interior, puedes ir arriesgándote más. ¡Es
una decisión personalizada!
Disciplina
Un
verdadero cambio de imagen puede ser un camino largo y difícil. A
veces no es sólo un corte de cabello y ya, sino toda una transformación
interior que se refleje en tu exterior y la nueva manera en la que te
quieres proyectar (lo verás hasta en tu cambio de postura). Hay día en
los que querrás desistir y te comerás ese dulce a medianoche o volverás a
ponerte tu ropa cómoda de antes, pero que eso no te detenga. Si te caes,
levántate.
No
todos los días se gana y lo importante es que recuerdes tu meta y no seas tan
dura contigo misma frente al espejo.
Dedícale
también tiempo a tu interior y eso te dará más fuerza de voluntad para
no caer en viejos hábitos y ser constante.
Trabajar
en equipo
Seguramente
en tu entorno hay personas que también quieren un nuevo cambio de imagen en su
vida. Comparte con ellas tus inquietudes, intercambien fotos, vayan
juntas al gimnasio, etc. ¡Apóyense! Otra cosa que me
parece muy útil es limpiar tu contenido digital (más útil aún
si en tu entorno cercano no hay nadie con metas similares a las tuyas, que
puede pasar).
En
esta era de redes sociales, a las que solemos dedicarle bastante tiempo, es
importante dejar de seguir aquellas cuentas que nos alejen de nuestra
meta o nos saboteen nuestro propósito y seguir aquellas que nos inspiren: fashion
bloggers, cuentas de ejercicios fáciles en casa, recetas saludables,
maquilladores, modelos plus size, coaches emocionales,
etc, donde además encontrarás usuarios con intereses similares a los tuyos
porque ya es una audiencia segmentada.
Y
recuerda, un cambio de imagen implica renovación. Asegúrate de no
quedarte sólo con el aspecto exterior y trabaja también en tus
emociones y sentimientos para que sea algo duradero.
La felicidad va más allá del número que marca un peso o la cantidad de
halagos que recibes en la calle, así que encuentra en ti la
motivación y la fuerza para tomar las decisiones más acertadas que te ayuden a
alcanzar esas metas que te harán sentir mejor contigo misma y, por tanto, tener un impacto positivo en todo
lo que te rodea.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario